El próximo Debate estadounidense se llevará a cabo virtualmente, para proteger a quienes participan después de que el presidente Trump contrajera COVID-19.
El debate, que está previsto para el 15 de octubre, tendrá la forma de una asamblea municipal.
El moderador y los participantes que harán preguntas estarán ubicados en un salón de actos, mientras que el presidente Trump y Joe Biden estarán en diferentes lugares.