La forma de resolver disputas de tarjetas de crédito y débito en la República Dominicana difiere significativamente de la de los Estados Unidos. A continuación, destacaremos las principales diferencias entre ambos países en este aspecto.
En los Estados Unidos, el proceso de disputa de cargos es generalmente más sencillo y favorable para los consumidores. Las compañías de tarjetas de crédito brindan procedimientos claros y establecidos para presentar una disputa. Los titulares de tarjetas pueden contactar a la compañía por teléfono o en línea, proporcionando los detalles de la transacción en cuestión y cualquier evidencia relevante. Las investigaciones suelen durar aproximadamente de 30 a 60 días, y en muchos casos, los consumidores obtienen reembolsos exitosos.
Por otro lado, en la República Dominicana, disputar un cargo con un banco puede ser un proceso más complicado y lento. En lugar de una resolución rápida, los titulares de tarjetas a menudo deben visitar personalmente la sucursal bancaria correspondiente. Esto puede llevar tiempo y requerir múltiples visitas para presentar la documentación necesaria y seguir el proceso adecuado.
Una de las principales diferencias es la carga de la prueba. En los Estados Unidos, generalmente se asume que el titular de la tarjeta es inocente hasta que se demuestre lo contrario. Sin embargo, en la República Dominicana, a menudo recae en el titular de la tarjeta la responsabilidad de probar que el cargo fue incorrecto o fraudulento. Esto puede ser un desafío, ya que requiere recopilar pruebas sólidas, como recibos, facturas y comunicaciones con el comerciante.
Además, la falta de una normativa uniforme en la República Dominicana puede dificultar aún más el proceso. Cada banco tiene sus propios procedimientos y políticas, lo que puede llevar a una falta de coherencia en el manejo de disputas. Esto puede generar confusión y demoras innecesarias para los titulares de tarjetas que buscan resolver sus problemas.
En los Estados Unidos, los titulares de tarjetas a menudo reciben un crédito temporal conocido como "chargeback" mientras se realiza la investigación. Esto les proporciona alivio inmediato y evita que se les cobre el monto disputado hasta que se resuelva la disputa. En la República Dominicana, sin embargo, es menos común que los bancos otorguen este tipo de crédito temporal, lo que puede dejar a los titulares de tarjetas en una situación más desfavorable.
En resumen, las disputas de tarjetas de crédito y débito en los Estados Unidos suelen ser más sencillas y favorecen más a los consumidores en comparación con la República Dominicana. Los procedimientos claros, la presunción de inocencia y la probabilidad más alta de obtener un reembolso hacen que el proceso en los Estados Unidos sea más favorable para los titulares de tarjetas. Por otro lado, en la República Dominicana, las disputas pueden ser más complicadas, requieren una carga de prueba más alta y están sujetas a una falta de uniformidad en los procedimientos bancarios.