La situación en Perú sigue siendo tensa después de que el ex presidente Pedro Castillo fuera destituido y arrestado en diciembre por intentar disolver el Congreso. Los partidarios de Castillo han salido a las calles exigiendo la renuncia de su sucesora, Dina Boluarte, y la realización de nuevas elecciones.
La situación ha llegado a un punto crítico debido a las bloqueos en las carreteras por parte de los manifestantes. El Ministerio del Interior ha tuiteado que "bloquear las rutas de comunicación es un delito" y ha informado de que ya han fallecido 10 personas debido a que las ambulancias no han podido pasar. Además, la crisis ha afectado al sector agropecuario y algunos productos básicos, como las papas y los tomates, han visto su precio triplicarse debido a los retrasos en las entregas.
Por esta razón, la Policía Nacional de Perú, con el apoyo de las Fuerzas Armadas, ha anunciado que desbloqueará las carreteras nacionales que se encuentran en estado de emergencia. El miércoles pasado, la presidente Boluarte llamó a una "tregua nacional", pero su discurso no logró disuadir a miles de personas que salieron a las calles de Lima exigiendo su renuncia.
La presidente Boluarte asumió el cargo en diciembre tras la destitución de Castillo, pero su mandato ha sido marcado por la violencia y el caos. Se ha acusado al gobierno de utilizar una fuerza excesiva para sofocar las protestas y el Defensor del Pueblo ha informado de que de las 56 personas que han fallecido en los disturbios, 46 estaban involucradas en enfrentamientos con las fuerzas de seguridad.
Los gobernadores de las regiones de Puno, Cusco y Apurímac también han pedido la renuncia de la presidente y esta semana, los políticos de la oposición han presentado una moción para destituirla. Sin embargo, Boluarte se ha resistido a dimitir y ha pedido a los ciudadanos que aseguren que sus protestas sean pacíficas.
La crisis política también ha afectado al importante sector turístico de Perú, con el cierre indefinido de la famosa atracción turística Machu Picchu a principios de este mes. Cientos de personas quedaron atrapadas por horas en los alrededores del citadel Inca antes de ser rescatadas. El Ministerio de Economía y Finanzas ha estimado que el costo económico para el país de las protestas asciende a 2.15 billones de soles.
La situación en Perú sigue siendo tensa, con protestas en las calles y bloqueos de carreteras que han dejado a varias ciudades aisladas. El gobierno ha tomado medidas drásticas para poner fin a las protestas, incluyendo la implementación de una operación conjunta entre la policía y el ejército para desbloquear las carreteras nacionales.
Los seguidores del ex presidente Pedro Castillo han salido a las calles después de que fuera destituido e arrestado por intentar disolver el Congreso en diciembre. Exigen la renuncia de su sucesora, Dina Boluarte, y la realización de nuevas elecciones.
El Ministerio del Interior ha declarado que "bloquear las rutas de comunicación es un delito" y ha informado que ya han fallecido 10 personas debido a que los vehículos de emergencia no han podido pasar a través de los bloqueos. Además, los precios de alimentos básicos como las papas y los tomates han aumentado significativamente en algunas ciudades debido a que los camiones no han podido entregar sus mercancías.
La situación ha afectado también a la industria turística del país, con el cierre indefinido del famoso sitio turístico de Machu Picchu.
Mientras tanto, el Ministerio de Economía y Finanzas ha estimado que el costo económico para el país de estas protestas asciende a 2.15 billones de soles. Es importante mencionar que el gobierno ha sido acusado de usar una fuerza excesiva en sus esfuerzos para controlar las protestas, y el defensor del pueblo peruano ha declarado que de las 56 personas que han fallecido en los disturbios, 46 estaban involucradas en enfrentamientos con las fuerzas de seguridad.
Es esencial que se encuentre una solución pacífica y justa para poner fin a esta crisis, y se espera que el gobierno y los líderes de la oposición trabajen juntos para lograrlo.