El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, dijo que un terrorista atacó la refinería de Amuay, pero no ofreció pruebas para respaldar la afirmación.
Maduro dijo que la refinería fue atacada el martes por un arma poderosa y de largo alcance, y que hubo una gran explosión. No hubo informes de daños o heridos. Maduro a menudo ha culpado a su oposición y a Estados Unidos por los ataques. Pero su oposición dice que es él quien echa la culpa al gobierno venezolano, incapaz de satisfacer las necesidades básicas.