A medida que omicron continúa provocando el aumento de casos de COVID-19 en todo el mundo, una nueva subvariante de omicron está comenzando a ganar terreno. La nueva subvariante oficialmente ninguna como BA.2 y no oficialmente como la variante sigilosa representa más del 50% de los casos en Dinamarca.
También se han detectado casos de la nueva variante en EE.UU. Lo problemático de la nueva subvariante es que es difícil de detectar y muchos infectados con ella darán negativo.