Rusia intentó aparecer en los titulares y afirmó tener la primera vacuna contra COVID-19.
La vacuna Sputnik V, que tiene una efectividad del 91% según el gobierno ruso (muchos científicos y médicos rusos no están tan seguros) es una vacuna de dos dosis al igual que las vacunas Pfizer y Moderna, que son 95 y 95% de efectividad respetuosamente.
Pero a diferencia de las vacunas Pfizer y Moderna, Sputnik V usa dos vacunas distintas y, aparentemente, los productos farmacéuticos rusos están teniendo dificultades para crear la segunda dosis, según un informe de Reuters.
Los rusos no han publicado cifras de cuántas personas han recibido la vacuna, pero se estima en 650.000, principalmente en la capital de Moscú.
Argentina ha recibido 300.000 dosis de la vacuna, sin embargo, solo se les ha enviado la 1ª dosis debido a las dificultades para crear la 2ª dosis. Argentina es el segundo país en aprobar la vacuna Sputnik V y planea comenzar las inoculaciones en los próximos días, incluso sin la segunda dosis requerida en el país.
Usar solo 1 dosis sigue siendo efectivo según los funcionarios rusos, sin embargo, solo tiene un 85% de efectividad.
Dado que los rusos no han publicado datos sobre la vacuna Sputnik V, a muchos científicos y médicos en Rusia y en todo el mundo les preocupa que la vacuna no sea realmente tan efectiva como afirman los rusos.