Seis personas, incluyendo a una niña de 8 años, han fallecido a causa de un enjambre de abejas después de que un autobús en el que viajaban cayera a un barranco y golpeara varias colmenas.
El trágico incidente ocurrió el lunes en Nicaragua, cuando el vehículo se salió de la carretera durante un viaje de una hora desde Jinotega hasta San Sebastián de Yalí, en el noroeste del país.
Aproximadamente 45 personas se encontraban a bordo del autobús cuando, al parecer, sufrió un problema mecánico, precipitándose 165 pies hacia el barranco y terminando en una plantación de café.
Todos los pasajeros sobrevivieron al choque inicial, pero el autobús perturbó a un enjambre de abejas africanizadas asesinas.
Los pasajeros fueron picados repetidamente por los insectos enfurecidos, y según se informa, seis personas fallecieron como resultado del ataque.
Entre los fallecidos se encuentran Reyna Isabel Olivas Montalván, de 84 años, Santos Arnulfo Calderón Castellón, de 38 años, Dilcia Flores Amparo, de 32 años, y Kenia Jazmín Soza Bonilla, de 19 años.
También entre los fallecidos se encontraban Eneyda Tórrez Zelaya, de 47 años, y su hija de 8 años, Andrea Carolina.
Además, otras 14 personas resultaron gravemente heridas en el incidente.
Varios de ellos recibieron atención en un centro de salud cercano, mientras que otros tuvieron que ser trasladados a un hospital más grande en Jinotega.
Fotos perturbadoras muestran a algunos sobrevivientes con cientos de picaduras dolorosas en todo su cuerpo.
La abeja africana de miel, también conocida como "la abeja asesina", es un híbrido entre la abeja europea de miel y la abeja africana de miel.
Las abejas africanas de miel fueron importadas a Brasil en 1956 para aumentar la producción de miel en el país. Sin embargo, al año siguiente, varias abejas escaparon de un apiario y comenzaron a cruzarse con las abejas europeas de miel.
Según el Smithsonian, las abejas africanizadas cruzadas se consideran mucho más peligrosas que las abejas de una sola especie porque reaccionan a las perturbaciones 10 veces más rápido y pueden picar hasta 10 veces más.
Las abejas africanizadas han causado más de 1,000 muertes reportadas en Brasil desde mediados de la década de 1950, y han llegado a países del norte como Nicaragua y Estados Unidos.