En un hecho impactante, una adolescente rusa disparó y mató a una compañera de clase e hirió a otras cinco personas antes de quitarse la vida en una escuela en el oeste de Rusia, según informaron los investigadores el jueves.
El Comité de Investigación de Rusia, encargado de investigar delitos graves, reveló que una estudiante de 14 años, que llevaba consigo una escopeta de acción de bombeo, estaba entre los fallecidos.
El Comité de Investigación anunció el inicio de una investigación criminal para esclarecer los detalles de este trágico suceso.
El diario gubernamental ruso Rossiiskaya Gazeta publicó imágenes del lugar del tiroteo en el Gimnasio N.º 5 en la ciudad de Briansk, ubicada a poco más de 100 kilómetros de la frontera con Ucrania.
"Alguien del octavo grado disparó y mató a alguien", dijo uno de los estudiantes que filmó a una multitud de evacuados reunidos fuera de la escuela.
Funcionarios de salud informaron que los cinco estudiantes heridos habían sido hospitalizados, y que uno de los afectados se encontraba en "estado crítico".
Las autoridades no revelaron el nombre de la tiradora, pero indicaron que habían detenido a su padre para ser interrogado, según la agencia de noticias estatal TASS.
El gobernador de Briansk, Oleg Bogomaz, calificó el tiroteo del jueves como una "terrible tragedia" y se comprometió a averiguar cómo la adolescente pudo ingresar armada a la escuela y acabar con la vida de su compañera de clase.
"Se brindará toda la asistencia necesaria a las familias de la joven fallecida y a los niños heridos", afirmó Bogomaz en la aplicación de mensajería Telegram.
TASS citó a una fuente en los servicios operativos que afirmó que los detectores de metales de la escuela no estaban funcionando, lo que permitió que la joven ingresara con la escopeta y un cuchillo sin ser notada.
Los tiroteos masivos en escuelas y universidades en Rusia eran raros hasta 2021, cuando el país fue sacudido por dos matanzas separadas en las ciudades rusas de Kazán y Perm, lo que llevó a los legisladores a endurecer las leyes que regulan el acceso a las armas.
En ese momento, el presidente Vladimir Putin solicitó una revisión de las leyes de control de armas, y se elevó la edad mínima para adquirir rifles de caza de 18 a 21 años, además de intensificar los controles de salud mental.
Las autoridades han culpado a influencias extranjeras de los tiroteos anteriores en escuelas, argumentando que los jóvenes rusos han estado expuestos en línea y a través de la televisión a ataques similares en Estados Unidos y en otros lugares.